Navidad, navidad compren sin cesar...

Veamos... en este post solo quiero contar cuan triste me pone esta época. Si, es cierto... soy uno de aquellos malditos pinches depresivos temporales que le carga esta época cargada de bienaventuranzas que nos invitan a ser buenitos siempre y cuando compremos muchos y muchisisisisimos regalos gastándonos el dinero que no tenemos. Y creo que eso es lo que me pone triste. El maldito consumismo al cual nos han acostumbrado. Los cabros chicos haciendole una kilométrica lista al viejo pascuero... pidiendo, pidiendo... playstations, bicicletas, computadores etc. etc.etc... como si su felicidad dependiera de ello.

¿Y que pasa con aquellos niños que no tienen su viejo pascuero proveedor?¿o su viejo pascuero se quedó cesante? ¿O el viejito ni siquiera tiene para comerse un pollito asado...?

Bueno, los adultos estamos curados de espanto. Pero los niños... algunos pese a sus carencias y necesidades aún mantienen la ilusión de que el pascuero este año si les traerá algo para navidad.

Es por eso que quiero avisar si es que alguien no sabe, o les pido que hagan correr la bola, de las cartas que mandan un montón de niños de bajos recursos, al viejito. Están en el correo central. Hay cientos o miles de ellas. Las personas del correo las leen todas pero solo pueden cumplir con algunos deseos pues no dan abasto...

...es por eso que, encontrandole un sentido real a la navidad perdida, podemos cumplir el sueño de algunos de esos niños más necesitados... una pelota, una muñeca, un pollito para la cena de navidad... es tan fácil hacer feliz a alguien...

¿me quieren acompañar por favor?...

Vamos al correo central, tomemos una carta y tratemos de cumplir un sueño...

Y les aseguro será una muy feliz navidad...